Encontramos un gato a la altura de la Capella de S. Jeroni. ¿Qué hace ah�. ¿Está perdido?. No es nada arisco. Se refriega contra nosotros buscando caricias... o calor. Tiene mucha hambre, devora los escasos restos de la comida que nos quedan. Lo abandonamos a su suerte, pensando en que será de él y confiando en que alguien más lo alimente.